La semana pasada se realizó una fumigación estratégica para combatir mosquitos, que son en su mayoría vectores de enfermedades como Dengue y Zika. Además, las medidas buscan prevenir el avance del Bariguí o «mosca negra» que se está volviendo plaga en varios distritos de la Cuenca del Salado. El Bariguí es una pequeña mosca que produce mordeduras para alimentarse, provocando lesiones inflamatorias en el lugar afectado.
La fumigación estuvo orientada a la mayoría de los barrios de la ciudad, y zonas estratégicas como la laguna, el cementerio, el centro de Pueblo Nuevo y la Planta de Tratamiento de Residuos.
Los productos que se utilizaron son de baja toxicidad para los humanos y letales para los insectos, por esa razón se pueden utilizar en el radio urbano, sin peligro para personas y mascotas.
Personal especializado de la Dirección de Saneamiento y Control de Vectores, dependiente del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires llevó a cabo las tareas de control. Esta acción fue gestionada hace un tiempo atrás por la Municipalidad de Castelli como medida preventiva y de ataque a la proliferación de insectos y roedores.
